Las 7 veces que Sam Heughan se mereció la nominación a los Globos de Oro

Un post de otro blog, que me ha parecido interesante traducir. Podéis leerlo a continuación:

Es cierto que la categoría a Mejor Actor es intensa. Hay algunos actores geniales y, sinceramente, ya solo viendo a Sterling K. Brown, Freddie Highmore y Jason Bateman en ella, fue suficiente para pensar: "Vale, lo entiendo". Pero Sam Heughan hizo un gran trabajo en la tercera temporada de Outlander. Ha hecho un trabajo maravilloso cada temporada, pero en la tercera, hubo momentos en los que te ponía un nudo en la garganta.

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Con todo esto en mente, he aquí el listado de las 7 veces en las que Sam Heughan mereció una nominación a los Globos de Oro.

# 1. El final de la guerra entre Jamie y Black Jack Randall
La guerra entre los británicos y los jacobitas no fue la única que llegó a su fin en el estreno de la tercera temporada de Outlander. La guerra entre Jamie y Black Jack Randall también terminó. Fue un hermoso baile entre los dos, sin palabras, donde el odio entre ambos se apreciaba fuerte y claro.

Ambos querían ver al otro muerto. Verse en el campo de batalla fue un momento "feliz" para los dos, ya que se dieron cuenta de que serían ellos quienes terminasen con la vida del otro.

Todo esto lo vimos desde los recuerdos de Jamie, lo que hizo las escenas aún más conmovedoras.

Las escenas posteriores en el campo de batalla también fueron hermosas. Cuando la nieve cae sobre los cuerpos, Heughan demostró que no solo podía interpretar al soldado fiero y animal, sino que también podía ser el guerrero moribundo, listo para que su vida terminase porque la mujer que amaba y su bebé ya no existían.

# 2. Las escenas finales entre Jamie y el joven Fergus (Romann Berrux)
Después de que al joven Fergus le corten la mano los casacas rojas, Jamie lo lleva de vuelta a casa, a Lallybroch. Una vez superado el impacto inicial, el Fergus niño no pierde el tiempo y le recuerda a Jamie la promesa que le hizo en París: ocuparse para siempre de él si algo le sucedía

No es que Jamie necesitara el recordatorio, pero Sam Heughan interpretó ese momento a la perfección, con una mezcla de emociones: culpa, orgullo, tristeza y alegría. Estaba feliz de que Fergus sobreviviera, pero al mismo tiempo se sentía culpable porque había perdido la mano. Al fin y al cabo, si no hubiera estado yendo hacia la cueva a verle, nada de eso habría pasado.

# 3. Despidiéndose de Willie
Uno de los momentos más desgarradores en la tercera temporada de Outlander sucedió durante el tiempo que Jamie pasó en Helwater. Después de darse cuenta de que su vínculo con Willie se estaba haciendo demasiado evidente, tuvo que tomar la difícil decisión de marcharse. Fue desgarrador para padre e hijo. Sobre todo para Jamie, que ya había perdido a su esposa, su primera hija y un segundo bebé (que Claire llevaba en su vientre cuando se marchó)

Si solo pudiera elegir una escena para que Sam Heughan hubiera tenido al menos un guiño por parte de los Globos de Oro (a falta de ganarlo) sería ese momento de la despedida. Mientras Willie gritaba a "Mac" que volviera, Jamie continuaba alejándose subido a su caballo, costándole incluso respirar.

# 4. La escena de la imprenta
Hay fans de los libros que no quedaron contentas con la escena de la imprenta, pero desde el punto de vista de la serie, este fue uno de los momentos más increíbles en la tercera temporada. Una vez más trajo todas las emociones a la superficie. Jamie se sorprendió por el regreso de Claire, ansioso por sus motivos para regresar, y sorprendido y horrorizado (por el bikini) al ver a Brianna en las fotos.

Pero eso no fue todo. También fue un momento pensado para que Jamie compartiera parte de su pasado con la mujer que ama. Mientras hablaban sobre Brianna e incluso Faith, Jamie confesó a Claire la existencia de Willie, trayendo a la reunión una tensión que en el libro no estaba (ya que en l libro no se menciona a su hijo).

NOTA: Ese fue un momento muy controvertido, ya que muchas fans de los libros no entendieron (yo incluida) porqué sacar a relucir a William justo ahí, ya que pareció que Brianna no le importaba demasiado (esta sensación apoyada por el hecho de que ni siquiera soltó una lagrimilla de emoción al ver las fotos, cosa que en el libro sí hace). Sam aclaró en Twitter que había sido decisión suya interpretar así la escena, sin llorar, porque optó por un Jamie que interiorizó más sus sentimientos.

# 5. Contemplando el motín en el Artemis
En esta escena, veíamos la desesperación que Jamie sentía al estar Claire en un barco diferente y encima lleno de hombres enfermos.

Jamie fue encerrado bajo la cubierta, prácticamente aislado, y todo lo que podía hacer era esperar que los dos barcos (tanto en el que estaba él como el de Claire) llegaran a Jamaica sanos y salvos. No es sorprendente que considerase medidas extremas para tomar poder tomar las riendas. Para ello, quiso chantajear a Fergus, pidiendo al joven que robase las llaves de la celda donde estaba confinado, a cambio de su bendición para que se casara con Marsali. De esta manera, al quedar libre, Jamie podría cometer un motín.

Finalmente, Fergus y Marsali encontraron otra forma de liberar a Jamie. Pero lo que sí estaba claro y se podía palpar en el aire era la desesperación de este.

# 6. Reconociendo a Fergus como si fuera su hijo
Después de escapar del cautiverio, Jamie terminó convirtiéndose en el capitán defacto del Artemis, cuando este fue dañado y los miembros de su tripulación asesinados. Y por casualidades de la vida ;) además terminaron llegando al mismo lugar donde Claire había naufragado tras haber saltado del Marsopa.

La isla tenía además su propio sacerdote, que se encargó de llevar a cabo la ceremonia de matrimonio de Fergus y Marsali. Fue en este momento que se nos recordó que Fergus no tenía oficialmente una familia, y por tanto, no tenía un apellido con el que casarse.

Jamie rompió el incómodo y vergonzoso silencio para reconocer a Fergus como si fuera su hijo. Todo lo que hizo fue darle un nombre a Fergus, pero había amor, esperanza y orgullo en sus ojos mientras veía a Fergus Claudel Fraser casarse con la mujer de sus sueños.

# 7. La reunión con Lord John
La amistad con Lord John fue uno de los elementos más inverosímiles pero hermosos de la tercera temporada de Outlander (NOTA: en el libro, como todo sucede mucho más lento y se desarrolla mucho más, no es tan inverosímil en absoluto). Hubo muchos momentos que nos mostraron que Sam Heughan podía actuar, y sin duda uno de ellos fue la reunión en Jamaica. Cuando pasaron a la sala, Jamie inicialmente se olvidó hasta de por qué estaban allí. Todo lo referente a Willie se le vino en ese momento a la mente.

Heughan personificó a ese orgulloso, preocupado y anhelante padre, mientras escuchaba todo lo que Lord John le contaba sobre su hijo ilegítimo. Era fácil ver que Jamie era un hombre que todavía amaba y extrañaba profundamente a su hijo. Mientras que su lenguaje corporal decía una cosa (intentado mantener la compostura), sus ojos nos decían otra, mostrando las emociones encontradas de ver a Lord John, por un lado, y de saber sobre Willie por otro.

NOTA: para mi, la tercera temporada ha sido, de las tres, la que más ha permitido lucirse a Sam. Lástima que los premios no hayan sabido verlo. ¿Hay alguna escena que echéis en falta? Yo esta que añado, en la cueva...